Nos miramos extasiados cada vez que coincidimos. Pensamos. ¿Quién da el primer paso? Ambos. Sin aviso las manos juegan a querer ser dientes y destrozar el cuerpo mío, el cuerpo tuyo. El tacto es mágico porque trata de hacer que dos cuerpos se vuelvan uno y, al destrozarlos, se mezclan para mostrarme y mostrarte lo bonito que es conseguir digerir los cuerpos. Solo con la mirada ya se cuecen nuestras pupilas. Con nuestros silencios llenos de ¿en qué piensas? En nada, y en todo a la vez. ¿Cómo es que llegamos al punto de cocinarnos a sazón de besos y caricias? No lo sé. ¿Lo sabes tú? Simplemente es un te adoro o dos que salen a la lucha de expresar lo que solo se puede sentir, y lo siento cuando te siento porque al sentirte está presente algo más que sentimiento.
Imagen By DebEndi

El reencuentro de promoción siempre es desastroso. Cuando hay desastre siempre se "pierden" cosas. Por lo tanto nunca ofrescas tu casa para hacer un reencuentro de promoción. ¿No es clara la lógica empleada?

Hace tres años mi hermana salió del colegio. Yo no sé hasta donde dicen la verdad las mujeres pero ella no era de las que son hinchas de la promoción. Si se da el momento, se da. Pero si te matas organizando el reencuentro con semanas de anticipo, etiquetando a todos en flyer de reencuentro en el Facebook, peleándote por la cantidad mínima de chancha, y acordando que el sitio de reunión será en el tan clásico barrio de Andamarca, y al final todo se quiebra ¿qué haces? ¿Los llevas a tu casa sabiendo el riesgo al que se exponen tus pertenencias materiales, tu piso, tu baño?

Mi hermana no lo pensó dos veces y a las 8:30 p.m me llamó y dijo: "Saca las sillas y esconde la laptop" ¿Qué puedo pensar?

A partir de esta llamada me cree un panorama: Esconde la laptop y persignate para que nada pase dentro de tu casa.

Dios es un ser que se toma todo al pie de la letra. No me persigné. Así que como no hay parte del pastel, él no se tomó la molestia de distraerse en un reencuentro de promoción. Escuche silbidos, querían que les abra la puerta. Yo no le abro a nadie porque no son de mi promoción. Que venga ella y los atienda. A partir de ese momento ellos eran SU problema. Encerrado en un cuarto con un televisor y la laptop sin Internet pase las 4 horas más raras de mi día y de estas fechas navideñas.

Si no era para dejar sus casacas era porque se confundieron de cuarto o porque uno de ellos estaba tan mal que se cayó de bruces en la cama y no se levantó hasta que su estómago le ganó la lucha al ahogo, hasta vomitar. Distraido entre la película Dioses y la final de los reyes de show, no me percataba de nada hasta que la vejiga (¿mencione que me encerré además con una botella de litro y medio de InkaCola?) mandó ir al baño. El grifo estaba destrozado, aunque todavía se podía caminar del recinto. Decidí no salir más.

A la 1:30 a.m., luego de escuchar como mi hermana ponía orden para ir a otro antro a seguir con la celebración, decidí salir. Mi sala, el baño y el pasadizo que los conecta están mojados, no húmedos ni con algún rastro de líquido sino mojados, embarrados con un especia de poción de alcohol, agua, detergente y algo que se pega a mis zapatos (que no sea vómito, por favor). Replanteamos la pregunta: ¿No es lógico que si tus amigos de promoción dejan hecho un desastre el sitio que los cobija en la noche de celebración, no debes invitarlos a celebrar a tu casa?

Mejor agarremos papel y lápiz. Pongamos guiones vacíos y juguemos al ahorcado. Fin

* Con este post rompo la predicción de que no escribiría hasta año nuevo. Además las circunstancias lo ameritaban. A propósito del título me gustó cómo Imma Turbau narra su novela "El juego del ahorcado". La recomiendo si te gustan las historias donde la incógnita queda marcada en las primeras páginas. Después de leer su obra quiero conocer a la autora en persona.
Foto by me

Hemos llegado hasta aquí. Hoy partiré de nuevo al pueblo que me vio nacer luego de una tensión total todo el día por saber si tenía un pasaje. Partiré para celebrar las fiestas de fin de año con mis padres. Al inicio ellos vendrían pero el cruce de horarios hace que ahora yo vaya hacia ellos.
Y qué puedo decir. He terminado el primer año en la PUCP (aunque solo han colgado la nota de un final, Damn It) y aprendí muchas cosas en este tiempo.

Aprendí a jugar mejor pichangas (aunque dicen que de arquero la puedo hacer), aprendí a abrirme y hacer nuevos amigos, aprendí a extrañar a mis viejos amigos, aprendí a caminar con cuidado en barrios no tan seguros, disfruté lo que es celebrar un fin de ciclo con amigos, dejé de fumar tanto aunque a veces se le vienen a uno las ganas, aprendí a controlarme a la hora de tomar, a la hora de gastar, a la hora de vagar. Aprendí a levantarme solo en las mañanas y hacerme responsable de mis actos, aprendí a valorar la presencia de mis padres, aprendí a vivir sin televisor, aprendí a ser fiel, aprendí a decir NO, aprendí a escribir mejor, aprendí a estudiar, aprendí a leer a conciencia y no solo por diversión, aprendí a dar hoy sin esperar que algún día me den.

Aprendía a colaborar, a hacerme dormido en el micro, a resistirme a un robo, a tirarme las clase, a llegar a las clases aunque todos digan no vayas. A pedir libros en la biblioteca, a admitir mi sancion por olvido de libros, a hacer mi cola para el básico, a comprar un tio bigote, o teddy o comer en popos, a comer pan el plaza vea, a caminar por calles con una cerveza en la mano, a caminar por el Olivar a las 2 de la mañana, a manejar un carro automático y uno mecánico, a coger caracoles de mar entre las piedras en Barranco, aprendí 4 rutas para volver a mi casa, 2 para ir a la universidad, una para el jockey, aprendí a convivir con personas normales, que muchas veces creí más que normales. Aprendí a dirigir y a ser dirigido, aprendí a citar y a analizar una novela o un poema. Aprendí que los impulsos son un objeto peligroso, aprendí a pedir perdon y a malograr cosas, aprendí de caminar solo por la vida, aprendí que si quiero a una persona le digo las cosas como son, aprendí a desconfiar de la gente y a confiar también, aprendí a extender mi saldo por todo un mes recargando solo una vez. Aprendí a jugar poker y a amanecerme y dar todo por un trabajo.

Si me preguntan si me gusta Lima, mi respuesta es que el punto no es si me gusta o no. El punto es si me acostumbro o no. Si es que puedo socializar e interactuar y desarrollarme normalmente, o no. Más que gusto, es costumbre. Y más que costumbre, uno va aprendiendo muchas cosas, no de la ciudad; de la vida.

PD. No escribiré nada por Navidad y creo que talvez algo por año nuevo. Si escribo antes de esas fechas aparecerá normalmente. Por lo pronto no tengo nada más que decir. Disfruten la canción de Ruben Blades.

Imagen por nachopop

11:40 p.m Una combi en Barranco.

En el parque del distrito suben alrededor de 20 muchachitos con traje rapero. Pirañas, a mi parecer. Se empezaron a sentar y al final me vi acorralado entre ellos. Uno dijo: Ya tengo una victima y se pegó hacia mi asiento.

- Primo, luquita pa'l pasaje pe'
- (Con el índice en el cuello) Estoy aguja, apenas puedo pagar universitario.
- No tienes, primo? Pero busca pue, busca (toca el libro en mi morral)
- Nada, puro libro. (Saco basura del morral) No tengo nada estoy aguja.
- Ahí ta, tas cargado (interviene otro de ellos tocando el celular en mi bolsillo)
- Nada, huevón. Suelta
- Ya, ya, pasa nomas ya. Dámelo nomas (empieza a forcejear con mi bolsillo)
- Oe tranquilo que pasa?
- (Uno de ellos saca una pistola de juguete y me la pone en la pierna) Ya fue, mira, me das todo o a la merfi que te meto bala.
- (Ya más asustado y empezando a gritar) OE! no tengo nada, suelta.
- Ya, ya. Dejenlo no lo molesten a mi pata - dice el de la pistola - déjenlo que se siente más adelante.
- Me safo com puedo de ellos y llego hasta la parte delantera del bus.

El chofer los "cuadró" y como la comisaría esta en su ruta, dijo que los dejaría ahí. Yo temblaba y esperaba que no bajaran en mi paradero a agarrarme a patadas. Llegué a los bomberos y la paz empezo a volver. Suerte de principiante.

Si un chiste da risa, es por dos razones. La primera es que nunca antes te lo habían contado; la segunda, es que eres tan freak que cada vez que te lo cuentan te vuelves a reir. Digamos que estoy dentro del primer grupo. Entonces analicemos la siguiente escena.

Sube un tipo al micro (polera gris, piel morena, voz ronca) y amablemente empieza a solicitar asiento para una señora, luego sustenta que es la terramoza y que no nos durmamos, ojo, que no nos durmamos porque al que duerma, sea hombre o mujer, le dará un beso.

El tipo viene, tal vez, desesperado porque solo tiene que vender una bolsa mas de sus famos turrones Arequepay que, contra todo lo que estos vendedores digan, no son arequipeños, son Arequepay. (got it?).

El tipo empieza con su rollo. Pero, JaJá!, ¡yo ya me lo sé! En vacaciones de medio año escuché, el mismo rollo pero en Ayacuchito. No es culpa del pobre hombre sino que esos chistes estan mas usados que medias de futbolista de de pichangas.

La cosa no acaba aquí, sino que al final, contra la voluntad del chofer que le estaba pidiendo pasaje porque su show demoro mas de 3 paraderos; empezó casi a rogar a un chico para que le ayude usando también la tan mentada estrategia de arrochamiento con las mujeres (hermanito, qué va a pensar aquí la señorita, que eres misio) En fin, chapa tu china y un Arequipay para darle sabor a la lengua.

P.D En este post estuve desanimado, y me dio rabia que el Arequepay tuviera demasiado dulce, Damn it. Ah! y no fue en la S, fue en el Chama.
Foto by Melodia ~

Desde que nací nunca expererimente la siguiente escena:

Yo, durmiendo y soñando alguna barbaridad o simplemente nada, echadito en mi cama con un fondo negro y de pronto una bulla que empiece a retumbar en mis oidos y despierto de golpe.
Veo a todos mis familiares ( o bueno a los que viven conmigo) al borde de mi cama con una torta y un grito de ¡feliz cumpleaños!

¿A todos algunas vez les celebraron así el cumpleaños? Es decir, ¿me he perdido el recuerdo de pasar un día totalmente perfecto? Rememoremos.

Tengo fotos del 1 de mayo del 2002, se supone que estoy con mis íntimos de 5to de primaria y jugamos (juego, en realidad) en la computaroda, ojo: todos jorobados y con cara de ludopatas que cualquiera pensaria que al crecer nuestras columnas tendrían serios problemas. Ese dia, que yo sepa, nadie me desperto y lo unico que hice fue quedarme en mi casa, comer una torta y elegir el plato de almuerzo. Despues de eso no recuerdo otro cumpleaños hasta 3ro. Solo recuerdo que entre 3 amigas (yo moria por una de ellas) me regalaron un Chicken Little que en este instante esta colgado detrás de mí. En 5to mi mejor amigo me regaló un libro de Vargas Llosa, Travesuras de la niña mala y al día siguiente me vine a ver a mis awelos aquí, a Lima. Este año llegaron mis papás exclusivamente para cantarme el Happy Birthday pero en casa de mis abuelos. No salí a tonear.

Pero lo que más recuerdo fue el 2007. Estaba en 4to yo tenía enamorada por esos días (me corto dos días después). Tuve que bajar hasta un parque cercano a mi casa (antes mi casa en Ayacucho estaba en las faldas de un cerro, sí, en las faldas de un cerro. Era como la mansión entre tantas casitas) porque ellas no tenían ganas de subir. Me regalaron una tarjeta jumbo de felicitaciones y mi ex me obsequió un peluche que decía "Te amo" cuando lo apretabas. En fin, en la noche se suponía que celebraríamos pero mi madre viajaba y me dejaba a cargo de la casa. Conclusión: las botellas de ron que trajeron fueron confiscadas por ella y no se podía tomar en casa, sorry muchachos no fue mi culpa.

Sin embargo, cuando ella se fue, sacaron una botella de ron y la combinaron con una de cocacola, nos sentamos en el jardín y empezaron a tomar, empezaron porque yo ni dos amigos más lo hicimos. ¿Por qué? No sé. Era pavo todavía por esos días y prefería abstenerme de alcochol. Ay, ay, ay, si así hubiera seguido. Pero bueno, ellos se fueron a las 8 y yo feliz me envicié en la computadora y a dormir.

A eso de las las 11 suena el teléfono y era la mamá de uno de ells diciendo que todavía no había llegado a su casa, yo le dije que ya habían salido y volví a mi cuarto.

Luego me entere que el hijo de la madre que desesperadamente había llamado a mi casa se había terminado la otra botella de ron en un parque y terminó vomitando toda la decencia del colegio ( me imagino a los sacerdotes diciendo algo así) y quien me lo dijo fue el coordinador de secundaria. Peor no podía ser porque él, precisamente ¡él!, era amigo de mi mama. La llamaron y ella se rió de las cosas que le hacía pasar, la palta no fue conmigo, fue con ellos, pero recuerdo siempre eso como el cumpleaños mas desastrozo, no por el hecho de que la cagaron, sino porque a los dos días me termino mi ex y, recien llevabamos poco mas de una semana. Que mala leche.

Caminé hasta su puerta a las 3 de la tarde y me sente en la vereda, con una arreglo floral en las manos. Miraba unas piedras en el suelo mientras la esperaba. Ella no sabía que había llegado de viaje, nadie lo sabía.

En un momento giré la cabeza a la derecha y allí la vi entrar por la puerta del callejón, creo que al verme se pasavolteó y avanzó preguntándose algo. No se inmutó mucho. Yo seguía en el suelo cuando se paró frente a mí, la saludé con un beso en la mejilla y le entregué el arreglo. Se notaba nerviosa. Le dije que quería hablar con ella.

- ¿Vas a estar ocupada?
- Emm... sí, tengo un tarea.
- ¡Ah! Ok, ¿y a que hora te desocuparas?
- No sé, es bastante.
- ¿Y te puedo ayudar?
- Emm... Claro.
- Entonces, ¿vuelvo más tarde?
- No sé, ve tu.
- No, yo siempre la cago mejor decide tu esta vez.
- Emm...
- ¿Me voy?
- No, quedate.

Abrió la puerta que tantas veces he cruzado y subimos hasta su morada. Ella entró a su cuarto, supongo que dejó el arreglo y su mochila, yo esperaba en la sala, entonces salió y yo la abracé y la recibí con un beso, un beso largo, esos que te quitan el aliento... Ella empezó a sollozar mientras nos uníamos en labios, yo también, le dije: No sabes cuánto te he extrañado... Y desperté.

Que puedo hacer para que esto sea diferente. Me siento pésimo al voltear y no encontrarte ahí, donde quisiera que estes para abrazarte, o simplemente que estés. Tengo que idealizarte todos los días, pero no estas ahí, justo ahí, justo cuando los demas andan volando acompañados, yo tengo que verlos desde la tierra, con una voz que dice: Ya pronto podras volar tu también. Y acaso alguien me pregunta por eso?, nadie pasa de un: ¿ytuflaca? Es que acaso no pueden preguntar: ¿Como te sientes?

Seria poco responder que la extraño demasiado, que estoy harto de tener que idealizarla y tener que simular que esta presente cuando no está. Detesto tener que limitarme de hacer cosas para dos, porque ella no esta; pero si estuviera, Ay! dios mío, cuantas cosas no compartiría con ella solo por el hecho de que ya esta a mi lado. Y miles de cosas más porque la adoro, sí, estoy tan seguro de esto que puedo decirlo, que no me da miedo estar mostrando un apariencia. Es real que la adoro y no tengo miedo de decirlo.


Alcánzame el reloj del padre,
el que apenas recuerdas haber visto
ayer cuando comias,
alcánzamelo

Que retornen tus ojos hacia mí,
que espero este milagro día
a día con un cafe entre sus manos,
que retorne el frenesí

Y si acaso no se puede
si es un sueño irrealizable
alcánzame el reloj
no me mires a los ojos

y deshecha de una vez
esas malditas ternuras
que te ascientan nada bien
así te lo dijo el cura.

Cuando los dorados corteses florecieron
nosotros dos estábamos enamorados.
Todavía tienen flores los corteses
y nosotros ya somos dos extraños.
Epigramas - Ernesto Cardenal

Y que te diré si apenas puedes responderme sin herir mis sentimientos, si apenas recuerdas que estoy aquí, escribiendo por ti, porque tu indiferencia es látigo mortal y a mí qué puedes estar diciendo, pero yo presiento que dentro de ti todavía resplandece ese Sí que escibiste un primero de febrero y que cada UNO recordamos. Y es que cada uno te quiero más y es que cada uno se quiere más. Espero no tener que recitarte nunca el epigrama de Cardenal.
Imagen por Visentico / Sento
Uno tras otro vuelves a encender los cigarrillos de esta procesión de dulzura y rencor, te atoras y empiezas a excusarte en la falta de costumbre, tomas un vaso y tratas de aliviar la picazón que dejó en tabaco en tu garganta, miras al techo y el espejo refleja todos tus pensamientos, la sensacion de caer al vacío invade tus extremidades, eso es. ¡Pum! Tranquilo, tranquilo, no pasó nada son sólo efectos del alcohol, levántate y sigue chupando como si parecieras un chico normal.


¿Qué o quién es Alianzin?


Alianzin es la mascota de Sobreprotexion. Es un personaje enigmatico que salio de una pagina de mascotas virtuales. Su blanco y azul oscuro lo definene como un visitante de las antípodas de esta ciudad. Nacio el 2 de octubre junto con Chayane. Sus aficiones no son conocidas, algo asi como el pezweon, pero alianzin no tiene situaciones tan insólitas. En fin creo que talvez se lleven bien con el aunque su presencia pase inadvertida entre tanta letra. Lo encuentran en el panel de la derecha, las 24 horas como botica - mejor dicho como p*** en celo - Si le das 4 clicks se cae al agua pero Shhh, no se lo digas. (Esto es lo que escribo desde la UPC, mi primera clase como profe particular: un desastre, para variar; pero senti el poder que sienten los prefesor)
Imagen de [auro]

I

Simón preguntó como se llegaba a la casa de Sofía. Desde que salió del país no la había vuelto a ver en 7 años. Esa noche era una pequeña oportunidad para resarcirse de los errores cometidos, de las burradas, de las pachotadas, como diría mi madre.

Sofía estaba casada con Roberto. Cuando Simón la cambió por sus estudios en París ella se deprimió mucho, no quería comer ni salir ni estudiar, un caso complejo que la familia no sabía como afrontar. La situación se agravaba mucho cada mes y en un momento llegaron a perder las esperanzas. Por esos tiempos Simón todavía se comunicaba con ellos, les escribía y les mandaba postales del país franco, su éxito como historiador se estaba empezando a vocear y como caída del cielo se le presentó la oportunidad de volver al Perú.

En el año 1998, perdiéndose el mundial que ganaría el país del sena, volvío al Perú aprovechando que los pasajes habian descendido. Su impacto de desmodernización fue tremendo, pero fue mas fuerte la sensación de ver a una Sofía distinta, más fría y calculadora de la que había dejado años atrás. Su belleza no había disminuido mucho gracias a una eterna recuperación que venía llevando. Ella lo saludo como si fuera un compañero de trabajo y guardó la compostura que se tiene ante un embajador. Simón se cansó de idolatrarla y, como ya había terminado el mundial y sus vacaciones, regresó a Francia luego de que Sofía le cerrara la puerta en las narices. Ni más vuelvo por ti, ¿entendiste?, ni más.

Pero 7 años depues volvió y decido a verla. Sofía se había casado con uno de los terapéutas de su lenta recuperacion y vivía en Las Casuarinas. A Simón se le hizo difícil encontrar su casa porque cuando se fue la zona era mas facil de ubicar, ahora algunos edificios le confundian. Cuando se atrevió a tocar la puerta un niño le abrió. ¿Tu mamá esta? El niño asintió y se fue corriendo dejando la puerta entreabierta. Sofía salió y se alegró un poco al verlo, al final cuando estuvieron juntos fueron felices, ella ya lo había superado y el quería quedar bien.

Se fueron a un cafe a charlar, repasaron epocas comunes y se quedaron callados cuando tocaron el tema. Simplemente Sofía se levantó y se fue, Simón comprendió en el acto, pidio un cafe y se quedó callado el resto de la tarde.

II

Cuando Simón se fue por primera vez a París, lo hizo por temor. Meses antes había recibido una amenaza de muerte por parte de alineados del PCP. El y Sofía habían sido amenazados, pero al conseguir la beca se libró de cualquier represalia. Sofía no tuvo la misma suerte.

La madre de Sofía murió mientras hacía un trabajo de campo en una provincia Iquichana. Era Antropóloga y se estaba especializando en el estudio de los origenes de la revolución armada. Los miembros del PCP ya le habían advertido pero, al no hacer caso a las amenazas, arremetieron contra el pueblo. No le hicieron daño a nadie, llegaron al pueblo especialmente para matar a la madre de Sofía. Los comuneron declararon que eran unos 5 o 6, que encerraron a todos en sus casasa para que no la defendieran y entraron al local comunal. Ahí la madre de Sofía no puso resistencia, pero les proclamó un discurso en defensa de los derechos humanos. Al pronunciar la segunda oracion le dispararon en la cabeza.

Mama Justina es una de las campesinas que vivía en el pueblo por esa época. Me contó como luego de asesinarla la arrastraron hasta el centro del pueblo, soltaron a todos los que estaban en sus casa y levantaron un discurso promaoísta donde, sacudiendo el cadáver, daban muestra de las medidas que tomaban contra los blanquitos aprovechadores de la ingenuidad campesina.

Ella murió un jueves, pero no de otoño. La policía no tenía nada esclarecido. Pusieron a 15 oficiales resguardando día y noche el pueblo. No hubo mayor síntoma de un retorno de las rondas del PCP. A los 3 días, resucitó la normalidad en el pueblo y la policía se retiró.

El cadáver de la madre de Sofía llegó a Lima el sábado. Le praticaron la autopsia de ley y confimaron su muerte a su hija. Ella lloró. Lloró sola porque Simón ya había partido a la tierra de las palabras agudas, se quebró. Su padre nunca estuvo, las abandonó cuando ella recien se formaba en el vientre de su madre, nunca escuchó siquiera su voz.

En el mundo se encontraba sola y con una carrera por delante. Fue ahí cuando recién empezó su crisis. Acabó sin mayor problemas sus estudios. Y entró a trabajar en una compañía inmobiliaria muy prometedora. Tenía a su cargo la sección económica y no defraudó a sus empleadores por mucho tiempo. Recuperó su antiguo ritmo de vida y decidío que el 86 para ella no existió. Trabajó duro para llegar a donde llegó y en todo esos cambalaches se volvió a enamorar. El terapeuta, padre del niño que recibió a Simón, era una persona muy buena y no diremos nada más de él.

Sin embargo Sofía a veces tenía sueños que le hacían recordar el año 86, se retorcía en la cama y casi siempre su esposo la levantaba asustado. Cuando Llegó el mundial Fracia 98, recibió la visita de Simón, más canchero y maduro que antaño. Ella trató de ocultarle todo respecto a su relación y tampoco tocar el tema de su madre. Hasta que no pudo más y mientra él la llevaba a casa, en ese carro negro en el que tanto les gustaba pasear, le sacó en cara su cobardía y la falta de sacrificio que tuvo para con ella, que nunca lo perdonaría y que necesitaba desahogarse. Al bajarse del auto Sofía corrió para su casa, le cerró la puerta en la cara, resbaló su espalda en la madera y se ahogó en llanto hasta el amanecer.

La avenida Arequipa. Un sábado sin nada que hacer y cansado de no hacer nada, volviendo a casa con la laptop en la mochila, los hombros destruidos y la barriga llena - corazón contento -. Los faros pasan y pasan iluminando apenas mi rostro que está más que iluminado por la luz del ómnibus, en realidad los faros no pasas, pasa el micro pero es como si todo el mundo se moviera, cambiara de sitio para que llegues a tu casa y te encierres en la Internet a revisar, tal vez, tu facebook.

En esos instantes, cuando veía luces de neón alumbrar en cielo y las fachadas de los edificios, volteé y en mi mente escuche: "hijo".

Nostalgia es una sensación de lejanía que uno siente cuando se encuentra lejos de sus seres queridos, nostalgia, eso es. Me sacudió esa palabra. Me puse a pensar a rememorar e imaginé a mis padres abrazándome, no, yo los abrazaba y los tres alegremente nos reencontrábamos, imagine a mi familia reunida, todos como era el año pasado.

Lamentablemente yo soy un chico, de esos asentimentados, que sufren para poder derramar una lágrima. Si tuviera corazón de pollo, seguro que por lo menos se me hubieran aguado los ojos. En fin, por ahora tengo que tomarme en serio mi contexto, tengo que estudiar para poder hacer que el tiempo vaya más rápido, para que por lo menos así pueda hacer que ese abrazo ocurra lo mas pronto posible.

Sentado en un asiento en clase de Etnicidad, se me vino a la mente la imagen de un zapato, pero un zapato especial, no era un zapato que cualquiera pudiera tener: un zapato de payaso.

¿Y dónde encuentrar un zapato de payaso? Pues, en el baul de la abuela. Creer que la abuela no pueda tener un zapato de payaso sería como creer que no tiene todavía timolina Leonar. La abuela es un ser enigmático que tiene de todo en su baul, aunque no tenga un baúl, pero cuenta con todo lo necesario para sobrevivir sin dinero. Por eso siempre que no puedo almorzar en la calle o en la universidad, o quiero ahorrarme un sencillo; voy donde mi abuela para que pueda alimentarme, aunque ella se lo toma a pecho el papea Perú y me empacha - lo último que fui a comer fue un riquísimo pollo broaster con ensalada, agua en la boca - y al final su té para el frío hijito.

El domingo iré donde la abuela para pedirle el último recibo de luz para poder tramitar mi DNI, maldita mayoría de edad. Además y como tema general tendré que ir a buscar un zapato de payaso, ¿por qué?, porque se viene algo nuevo. Con mi propia venia se viene un zapato de payaso.

Hace un añor que publiqué el primer post en Sobreprotexion. Empezamos con un poema y hemos pasado por anecdotas, narraciones, prosas y ultimamente cronicas. Sinceramente ha sido muy bueno para mi poder escribir muchas cosas personales o pensamientos intimos en el blog. Nadie me lee y pienso que pueden leer esto como un discurso mas.

A veces publicar estas cosas, como las pienso o como inicialmente las escribo me ha traido problemas. Y es que el rol que desempeño en este blog a veces no concuerda con los roles que desempeño en la vida cotidiana, a veces chocan entre sí y dejan una tremenda sensación de agresión o desentendimiento de mi parte. A los que alguna vez pude ofender, - y que no se me tome como el arrepentido que nunca falta - les pido disculpas. Y también les pido disculpas a todos los que alguna vez leyeron alguna entrada, alguna prosa, porque sin duda se decepcionaron.

No soy brillante mis estimados lectores pasajeros, tengo mucho camino por recorrer y es menester que me caiga antes de llegar a mi calvario. Este post es de celebración y de agradecimiento. Lo primero porque ya pasó un año, y se pasó volando y acarreando el tránsito del colegio a la universidad, de una ciudad de provincia la capital. Lo segundo porque por aqui pasaron alguna vez como lectores ajotaerre, ross, mama pío, tesha, mi hermana la melco y talvez alguno que otro que lo tenga agregado al Facebook y haya seguido el link que a veces pongo en mi estado. Gracias a todos. Prometo tropezarme y equivocarme más a me menudo.

El profesor Rosales pidió una cronica de la fiesta de promoción. No se me ocurrió nada más y no pienso escribir más sobre ese tema. La foto no tiene nada que ver.


Mi fiesta de promoción.

Fue un lunes, para variar. Cándidamente llegué bien presentado con un folder manila con unos versillos de Benedetti en el interior. Por esos días había regresado de Lima – puesto que yo vivía en Ayacucho – mi mejor amigo. Juntos fuimos a la ceremonia luego de recoger a su pareja de promoción. Mi pareja todavía se estaba cambiando a esa hora, yo pasaría mas tarde a recogerla. Antes de lo previsto empezaron a llamar a los alumnos para la graduación, todos pasaban con sus parejas. ¿Y la mía? Ni siquiera contestaba el celular. Mi hermana, mi padrino, mi mejor amigo, todos estaban medio enojados con ella por su falta de compromiso, su falta de delicadeza.

Tuve que pasar solo al salón, con mi folder manila. Hablaron los directores, las mamás, y como parte del acto protocolar yo tuve que hacer un discurso, para eso llevaba el foldercillo. Innové con un poema de Mario Benedetti y aplausos, las fotos y el baile con la pareja. Todavía no había llegado la mía. Bailé entonces con mi madrina mientras todos bailaban con chicas de nuestra edad. Luego mi madre tomo mis manos y cuando ya casi acababa el baile se apareció mi pareja. Los que venían conmigo, sobre todo mi madre, mi hermana y mi madrina, la miraron con cierta ira, a mí me daba igual. Terminé bailando con ella y luego vendría la fiesta propiamente dicha.

Cuando empezamos a bailar con música del DJ, llegó el muy inoportuno enamorado de mi pareja, estaba en la puerta muy alcoholizado y ella, prefiriéndolo, se fue a atenderlo. Me quedé solitario como un honguito, esos que crecen escondidos en la parte más oscura del bosque. Por suerte, las parejas no eran exactas, siempre había gente – sobre todo varones – que no bailaban, así que mis pies no se quedaron ociosos mucho tiempo.

Con mi mejor amigo, meses atrás, decidimos terminar la fiesta de promoción muy ebrios. Yo no lo logré porque bailaba seguido, él se quedó dormido alrededor de la 1:30 a.m. En los momentos que no bailaba, me dedicaba a conversar cosas sin importancia o tomarme fotos con amigas de mi promoción. Además, como pertenecía al grupo de periodismo del colegio, por momentos agarraba la cámara y comenzaba a hacer una especie de recorrido general del salón de baile y también tomaba fotos de todo lo que pasaba.

Mi fiesta de promoción fue corta. Baile, me alcoholicé con mi mejor amigo pero a las 2:30 de la mañana, cuando la fiesta recién debería comenzar, mi padrino vio a mis papas un poco “picados”, se lo dijo a mi hermana y ella decidió que nos íbamos. Tuve dos impresiones fuertes, una era lo temprano que nos retirábamos y la otra era una cachetada que me dio mi hermana al verme un poco ebrio. Simplemente le encargué a mi mejor amiga que cuidara a mi padrino y, como si fuéramos compadres, salí abrazado a mis papas, uno a cada brazo caminando en ligero zigzag entre las muestras de aprecio que nos mostrábamos. Mi mejor amigo dormía en el regazo de su madre y yo salía dando tumbos del hotel donde celebrábamos nuestro cierre de la etapa escolar. Qué noche.



Señor de los recuerdos bendice esta mesa en la que estamos reunidos escritor y escrito. Ven tu a reclamar los derechos de tus personajes, de sus acciones y consecuencias. Ven tu a descubrir fantasias y legados de artista frustrado. Ven tu a destrozar este maleficio que apenas y puede ser advertio. Ven sana, salva y santifica. Ven, asomate a la puerta y preguntame por qué hoy estamos reunidos en esta mesa, señor de los recuerdos, escritor y escrito.

Rebuscaba entre los *.doc de mi carpeta de creación literaria y encontré esto. Con la venia de Ajotaerrre.


EXTRAVIADO


Me perdí…

salí como siempre a disfrutar mi vida,

te seguí, y me perdí


Empecé a caminar sobre tus pasos,

respiré tu aire y tu indiferencia,

mis ojos solo quería ver tu rostro,

mis pies, seguirte

y en mi corazón una esperanza

¡deja de ser indiferente!


No sé cuánto tiempo ando perdido

en tu vida, en mi vida,

me he perdido en tus labios,

en tu cuerpo,

amasando este amorío

que elimina otros recuerdos


Me perdí…

salí como siempre a disfrutar mi vida,

y la disfruto a tu lado, querida,

pero me perdí