Imagen by alonsodr

Ella dice no y yo callado agacho la cabeza y me comienzo a retirar dejando los billetes en la mesa. Sin arrepentirme de nada camino por el malecón. Fue un gran idea traerla a un restaurante como estos que quedan tan cerca al mar, ese mar tan verde por la suciedad, que pone autista si es que tan solo me paro frente a el sin zapatos.

Camino por arena humeda que apenas transmite su frio a la planta del pie del cual cojeo, y las algas se enredan entre algo mas que solo mis pies y la arena, se enredan con todo, con los sentimientos y con la sensacion de sentirse atrapado y sin salida. Se queda callada mi conciencia y empiezo a divagar dentro de mi propio pensamiento.

Pienso que seria muy bonito caminar por aqui de día y no de noche como hoy. Tengo calor y me quito el saco y la corbata mientras los voy dejando tiradas por la playa. Ella debe estar impaciente, sin saber que hacer o decir, simplemente se debe haber atornillado a su silla esperando que salga del baño.

Cojo el saco y la corbata y corro hacia la terraza del Buen Sabor. Me acerco a su oido y le digo: Quieres casarte conmigo?

Ella dice no y yo callado agacho la cabeza y me comienzo a retirar dejando los billetes en la mesa.
Imagen by * Calvi *

Para todos los que no me leen, los que no se cuidan de
mí, pero de mí se cuidan (aunque me ignoren)

Vicente Aleixandre

Al escuchar su nombre el viejo se levantó del asiento y caminó los pasos necesarios para llegar al estrado y recibir el prermio, con voz gruesa empezó a recitar:

"Al azar las palabras se lanzan. Una a una penetran en los corazones de los que, tal vez, se atreven a leernos. Solo se distraen con lo que elucubramos en silencio. De lo que meditamos cuando estamos comiendo, durmiendo, soñando, viajando, sentados en el baño, en la ducha, al despertarnos. Ellos se distraen y nosotros nos realizamos. Al azar las palabras no se lanzan.

Me preunto quién nos lee. Me pregunto quién me lee. Si es la persona ideal que necesita esas palabras en ese preciso momento, o si es alguien cuyo sentido no esta orientado hacia mis palabra y solo me coje por tener algo en qué distraerse. Dicen que en determinados momentos estamos preparados para determinados libros.

Yo no terminé de leer Ulises porque senti que no estaba preparado. Pero si leí Cien Años de Soledad, libro que marco mi pubertad y con el cual me identifiqué desde el momento que vi su tapa blanca en la libreria, libro que volvere a releer para darle un mejor sentido a mi concepto de Macondo; pero, si existe ese momento, ¿nuestros escritos se limitan solo a los lectores que en ese momento sienten lo que tratamos de explicar con palabras? ¿Un texto atrae a su lector, es el texto el que se prensenta ante un lector en el preciso instante de su vida, o simplemente existen las coincidencias en el mundo? Esto último es un tanto controversial y a mi juicio, no existen coincidencias en el mundo.

Quién nos lee no es más que una adaptacion de la pregunta para quién escribo (Título del conocido poema de Vicente Aleixandre, del cual he sustradio algunas lineas) Y entonces puede saltar la respuesta - o paradigma - "Yo no escribo para nadie, ni para que nadie me lea, escribo porque es la unica manera de que salte lo que llevo dentro, es la unica manera de vivir libre en un contexto con limitaciones, es buscar la perfección en las palabras e idealizar un mundo que no es, que no ha sido y que no será posible, para eso escribo. Yo escribo para algo, no para alguien".

El viejo detuvo su discuro entre palmas, dio los pasos que necesitaba para llegar a su asiento y la ceremonia de premiación continuó.


Soy un espectro que va por las aguas,
que corren mojando algo más que palabras.

Soy un espectro que sabe navegar,
y naufraga en las palabras,
que mojadas van quedando.

Soy un espectro singular,
que se roba las sonrisas,
que lamenta las desgracias,
que se baña de emociones,
y se pierde en tus rincones.

Soy un espectro,
que malgasta su dinero,
sobrevive con tequieros,
que se lanza a las aguas,
se divierte con palabras.

Soy un espectro,
joven, ágil y risueño,
soy un espectro,
que no sabe combatir miles de sueños.

Soy un espectro que nace cuando hay sombra,
y en la demora de los mayos,
de mi lejana muerte se asombran.

Soy un espectro,
así he sido siempre,
como siguiendo la corriente,
que mal le cae a las palabras,
y se refugia en sentimientos,
y vive solo de tequieros.


(*) inspirado en mañana oscura 0 del blog Cuadernos de Colmillo. De lejos su video es mejor que el mío. Pero yo vivo cerca de las dos cruces y me parecio interesante =)

Musica: Frances limón de Los Enanitos Verdes